Plantean sustituir leyes ambientales por un Código Nacional de Protección al Ambiente
- El objetivo es contar con un solo ordenamiento en la materia, que sea claro, coherente y práctico
Senadoras y senadores de Movimiento Ciudadano y del Grupo Plural, a través de una iniciativa, propusieron crear un Código Nacional de Protección al Ambiente y con ello derogar diversas leyes en la materia, por ser complejas, dispersas, contradictorias, con vicios legislativos y en algunos aspectos, no armónicas con la Constitución Política.
El objetivo, indicaron, es contar con un ordenamiento en materia ambiental claro, coherente, práctico y relevante, que brinde certeza jurídica tanto a la ciudadanía como al Estado, acerca de las obligaciones, responsabilidades y deberes que cada actor político y social deben tener en cuanto a la conservación y protección del medio ambiente.
La propuesta abrogar diversas leyes en esa materia, reforma la Ley Federal de Responsabilidad Ambiental y expide el Código Nacional de Protección al Ambiente, Reglamentario del párrafo quinto del artículo 4 y 27 Constitucionales y de los Tratados Internacionales de los que México es parte.
Argumentaron que con un solo Código en la materia se pueden superar algunos de los vicios legislativos que actualmente padecen las leyes ambientales, como el abuso de la utilización de definiciones en las disposiciones generales de los cuerpos normativos, pues en algunos casos estas resultan obvias y, en otros, contradictorias.
Señalaron que entre otros aspectos que deben armonizarse, se encuentran los relativos al procedimiento administrativo en materia ambiental, las inspecciones técnicas, las medidas de seguridad y el régimen de sanciones, debido a que entre una ley y otra, éstos son distintos.
De igual forma se busca corregir imprecisiones y actualizar la denominación de dependencias federales que se mencionan como secretarías que han desaparecido o que hoy en día tienen un nombre distinto, manifestaron.
También establecen los principios de precaución y previsión para prevenir los riesgos y daños al medio ambiente, porque su reparación puede ser lenta, muy costosa o, incluso, imposible, independientemente de que se castigue a los responsables con todo el peso de la ley.